Comienza la campaña de comuniones de manera tímida pero reconfortante para este estudio. El año pasado llegamos tarde y éste ya nos subimos al carro gracias a que nos demandan algo diferente. Para ejemplo esta sesión que hicimos a Adrián y su familia en la playa de Verdicio, un escenario que si no novedoso, sí es diferente a lo que tenemos acostumbrado. Salimos así del sempiterno estudio y los clichés tradicionales para realizar una sesión divertida y con un resultado diferente. Muchas gracias a vosotros por confiar en mí y aquí un pequeño adelanto de lo que puede ser y una foto realizada por mi asistente técnico Laura Hevia que ilustra bien un momento de la sesión.
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